La psicología industrial, también conocida como psicología industrial-organizacional, es una de las ramas de la psicología más popular y valorada. En un mundo contemporáneo en que las empresas son cada vez más grandes y la competitividad va en el mismo sentido el de aumentar la existencia de especialistas en el comportamiento humano dentro del entorno industrial es una necesidad de primer orden. Esto no significa que la figura del psicólogo industrial sea plenamente conocida, sino que habitualmente se le considera solo como la persona que realiza la selección de personal. Sin embargo, ese es solo uno de los muchos temas de los que se ocupa la psicología industrial ¿Quieres conocer otros? Sigue leyendo.
Objeto de estudio de la psicología industrial
La psicología industrial estudia científicamente el comportamiento del ser humano en entornos profesionales. Un psicólogo industrial aplica los conocimientos que ha acumulado la psicología con el objetivo de mejorar la eficiencia de las empresas, el desempeño de los trabajadores y el bienestar de las personas que componen la organización.
Temas de interés de la psicología industrial
Entre los temas de interés de los que se ocupa la psicología industrial destacan:
Análisis del puesto de trabajo: ¿Qué funciones debe desempeñar una persona en determinado puesto? ¿Qué habilidades debe tener para realizar esas funciones? Son algunas de las preguntas a las que intenta responder un especialista en psicología industrial.
Selección de personal: una vez definido qué habilidades son necesarias tener para desempeñar determinadas funciones, toca buscar a la persona con esas características. Desde la psicología industrial se crean técnicas e instrumentos que permiten hacer más eficiente y eficaz el proceso de selección de personal.
Adaptación del puesto de trabajo al trabajador: la psicología trata con seres humanos y de cierta forma, la psicología industrial trata la relación del ser humano con máquinas o sistemas despersonalizados. Está entre las tareas de este campo adaptar las características del puesto de trabajo a las condiciones del trabajador. La introducción de pausas en la actividad o la estructura de determinadas máquinas toma en cuenta el factor humano en los entornos laborales.
Motivación y sistemas de recompensa: en un momento de la historia de la psicología del trabajo, los investigadores comprendieron que por mucho que se estableciera minuciosamente cómo debía desempeñarse una actividad para obtener los mejores resultados; había un factor clave de la productividad que se les escapaba: la motivación del trabajador.
Los psicólogos industriales comenzaron a centrar su atención en cómo aumentar la motivación de los empleados, haciendo un uso especial de los sistemas de recompensa que van más allá del salario básico.
Evaluación del desempeño: la psicología industrial también se ocupa de crear métodos y técnicas que permiten evaluar, de forma sistemática, si en la empresa se están cumpliendo los objetivos a nivel individual y grupal. Este proceso evaluativo en realidad tiene funciones más amplias, por ejemplo, permite apreciar si la selección de personal está siendo eficaz o si los programas de incentivo y de formación están funcionando.
Capacitación profesional: la permanente evolución de la tecnología y el entorno hace indispensable la formación constante de los empleados. Desde la psicología industrial se estudian las necesidades de formación de los trabajadores o de la organización en general, en muchas ocasiones en función de cambios que se prevén en el futuro o apoyándose en procesos evaluativos como el que comentamos con anterioridad.
El diagnóstico de las necesidades de capacitación es el punto de partida para el diseño de itinerarios formativos que permiten satisfacer las necesidades detectadas.(universidadviu.com)
Cómo puede ayudar a negocios
Paul Muchinsky desarrolló un prolífico trabajo de psicología aplicada al trabajo en el que definió las formas en que los psicólogos industriales pueden beneficiar a los negocios y empresas.
Capacitación y desarrollo
Los psicólogos en primero lugar pueden identificar los roles en la empresa. Aunque este trabajo corresponde comúnmente a la administración, siempre se puede contar con la ayuda de un psicólogo calificado para definir la estructura organizacional.
El psicólogo además puede identificar las habilidades requeridas para desempeñar esos roles más allá de la formación académica. Por ejemplo, puede que para un determinado rol sea mejor una persona extrovertida, que sea gentil y al mismo tiempo elocuente con sus palabras.
Además de esto, los psicólogos industriales pueden ayudar a las empresas a desarrollar programas de capacitación eficientes, que hagan crecer a los empleados de forma saludable.
Selección de empleados
Los psicólogos son muy efectivos en el departamento de recursos humanos. Estos se pueden encargar de llevar a cabo las entrevistas, diseñándolas inteligentemente para que los que apliquen realmente respondan a las necesidades de los puestos que se deben llenar.
Y pasada la etapa de las entrevistas, los psicólogos industriales pueden analizar los perfiles para recomendar al más indicado. Por tanto, estos psicólogos son claves en el diseño de las pruebas o la formulación de las preguntas, las entrevistas y el proceso final de selección.
Ergonomía
La psicología industrial también estudia el impacto que tiene el entorno en los empleados. Por eso analiza los espacios y cómo estos afectan de forma física y psicológica a los empleados. Este aspecto puede ser subestimado, pero la verdad es que los dueños de grandes industrias que prestan atención a estos detalles ven cómo la productividad mejora significativamente.
Una oficina demasiado pequeña, donde entra demasiado ruido del exterior o donde hay desorden y cosas acumuladas, no estimula la productividad. Los psicólogos conocen los requisitos que debe tener un espacio para considerarse saludable para la salud y para la mente y en base a eso pueden hacer las respectivas recomendaciones para reducir el estrés laboral.
Gestión del desempeño
La psicología laboral estudia métodos para medir los niveles de desempeño de los empleados. El psicólogo industrial nunca está desocupado, al contrario, mantiene la organización en constante experimentación hasta lograr los niveles más óptimos de productividad.
Puede que pienses que tu empresa está llevando las cosas bien, pero un psicólogo puede encontrar la falla en tu razonamiento. Al analizar a los empleados y sus cargas de trabajo, este profesional está más que capacitado para decirte qué áreas se deben mejor y dónde deberías bajar la presión para evitar estrés de los empleados.
Por lo tanto, la psicología industrial debe formar parte de tu estrategia de crecimiento sano y seguro.
Vida laboral
Mejorar la productividad significa para la psicología industrial, mejorar la calidad de vida de los empleados. Si los empleados son felices, trabajarán gustosamente, concentrados y darán su mejor esfuerzo.
Pero si los empleados se sientes frustrados con sus labores, creen que están siendo mal pagados o que están recibiendo un trato injusto, ten por seguro que la organización, a mediano plazo fallará. Porque las personas pueden soportar la presión por poco tiempo, luego de eso estallan y generan caos a su alrededor.
Un psicólogo te puede enseñar cómo tratar a tus empleados y cuáles son las necesidades reales a cubrir para que estos se sientan más dichosos y se comprometan con tu empresa. Finalmente, los psicólogos se encargan de evitar a toda costa eso que ahora llaman “ambiente tóxico” en el lugar de trabajo.
Desarrollo organizacional
La psicología industrial finalmente se centra en la estructura de la organización en su conjunto. Los psicólogos se encargan de asesorar a las empresas sobre cómo mejorar la productividad mediante la reestructuración y el rediseño, tomando en cuenta la satisfacción de los empleados y las ganancias para la empresa.
Por todas las razones antes expuestas, contar con un psicólogo industrial es importante para garantizar el crecimiento de la organización y su estabilidad a largo plazo.
Muchas organizaciones ponen en marcha planes de incremento de la productividad sin tener en consideración la presión que ejercen sobre sus empleados y esta es en definitiva la receta para el desastre. Pero el psicólogo industrial tiene mucho trabajo qué hacer en una organización, es un as bajo la manga en todas las etapas de trabajo.(sicologiahoy.com)
Fuentes:
REDACCIÓN WEB DEL PSICÓLOGO