El manual de instrucciones con el que se ensamblan nuestra biología está escrito en el ADN, pero, es posible que los genes además de regular el desarrollo de nuestro cuerpo también influya en nuestra personalidad, en esta entrevista se debate está cuestión con Dean Hamer, genetista de los institutos nacionales de salud de los EEUU y divulgador científico. Hamer a recopilado numerosas evidencias que sugieren que la felicidad, la espiritualidad, la orientación sexual y otras características de la personalidad tendrían un componente genético.
¿Cómo estudian la felicidad?
En mi laboratorio también estudiamos la felicidad pero desde una óptica totalmente distinta, analizamos los genes que regulan la personalidad, una de ellas se llama gen del receptores D4 de la dopamina y controla la dopamina que se libera en el núcleo del cerebro, se descubrió de una forma muy interesante, un científico como yo realizaba experimento con ratas que llevaban electrodos en el cerebro, cuando las ratas se acercaban al borde de la jaula recibían una descarga, todas las ratas salían corriendo, habían aprendido a salir corriendo al centro de la jaula menos una, esa rata seguía dirigiéndose una y otra vez a la jaula, que pasaba, descubrieron que el electrodo de la rata estaba localizado en el núcleo accumbens, el núcleo libera dopamina y si recibe una descarga es la experiencia más placentera del mundo, resulta que si se les administra a la rata una descarga en este núcleo, preferirán recibir la descarga antes que aparearse o comer, lo preferirán a cualquiera cosa.
Descubrimos en el laboratorio que este gen D4 que libera dopamina está relacionada con el nivel de felicidad de las personas a lo largo de su vida. Es casi como un termostato que determina lo feliz que es alguien. Eso si, para un momento concreto que decide lo felices que somos.
Desde los albores de nuestra especie la espiritualidad nos ayudó a ver la vida con optimismo y el ser más felices a pesar de las adversidades. Que la pareja te deje, que tu empresa haga suspensión de pagos o que se te muera el perro son situaciones que crean infelicidad y que son ajenas a nuestra genética. Pero el saber encajar estas situaciones si que puede estar relacionado a nuestro ADN. A lo largo de la evolución de la humanidad creer en Deidades, en fuerzas sobrenaturales o en otras vidas, nos puede haber ayudado a seguir adelante, a luchar contra los elementos y a procrear pese a nuestro inevitable destino, la muerte.
La espiritualidad tiene un componente genético, al margen de los cerdos religiosos, este concepto de espiritualidad contempla no solo la devoción por Dios, si no también otras cuestiones como el sentimiento de conexión con la naturaleza, con el universo o el misticismo. Mi hipótesis sugiere que existen genes que nos predisponen a ser más proporcionado espirituales, para estudiarlo utilicé unos cuestionarios de personalidad que realizaron unas mil personas y que cuantifican su espiritualidad, está muestra estaba compuesta por gemelos idénticos, mellizo, hermanos y más.
Luego, tras realizar estudios moleculares el investigador encontró un vínculo entre esa medida de la espiritualidad y un gen, se trata del VMAT 2, una secuencias con las instrucciones de una proteína relacionada con el tráfico en el cerebro de moléculas como la dopamina y la serotonina, moléculas ligadas a sentimientos como el placer, la motivación o la ansiedad entre otros. El hecho es que quienes poseían una versión determinada de ese gen, daban resultados mayores en los test de espiritualidad que los que tenían otra versión no tan espiritualidad.
Sugiero que este gen podría predisponer a las personas a la espiritualidad pero también aclara que es posible que no sea el único. Además a esta posible contribución genética hay que añadir otros factores como el entorno familiar y social, el desarrollo embrionario y otras variables que modelarían nuestras creencias. En cualquier caso si la espiritualidad es algo debido en parte a la genética, sería a si mismo hereditaria. Un carácter que según la hipótesis contribuiría afrontar la vida con un mayor optimismo ante las adversidades y que podría generar un mayor éxito evolutivo en nuestra especie.
¿Cómo se utilizan los genes para influir en la conducta?
Utilizamos genes para estudiar la conducta, te acabo de contar la historia del gen que influye en la felicidad, pero hemos descubierto otro que tiene que ver con la ansiedad, la depresión y todos los sentimientos negativos, en efecto, afecta en el cerebro al mismo gen sobre en el que incide el prozac el famoso antidepresivo, funciona más o menos de la misma manera, podríamos decir que algunas personas la mitad de las personas del mundo nacen con su dosis de Prozac, son esas personas más alegres, las más felices, en cambio la otra mitad de la población no tiene Prozac de nacimiento ni es tan feliz, es muy interesante porque r suelta que el Prozac genético tienen los mismos efectos secundarios que el prozac, interfiere con la libido y con el sexo.
Los que son felices y tienen esa especie de prozac no quieren practicar el sexo tan a menudo en cambio los que tienen un nivel más reducido de prozac tienen relaciones sexuales con mucha más frecuencia lo cual demuestra que no hay mal que por bien no venga y explica porque tenemos personalidades tan variables, porque algo que puede ser bueno en una situación, puede ser malo en otra.
Estudiaste sobre la influencia de la genética en el comportamiento sexual. ¿Avanzamos algo en este punto?
Hemos avanzado en la investigación, por su puesto hay muchos aspectos en relación, por ejemplo la frecuencia con lo que se practica, lo que te gusta o no te gusta, con quién quieres tener relaciones sexuales pero sin duda uno de los más importantes es si te gusta practicar sexo con personas de tu mismo sexo o sexo opuesto.
Ahora hay indicios muy sólidos que indican que los genes desempeñan un papel importante en la orientación sexual de hecho, en los últimos 5 años de han llevado a cabo 3 estudios muy exhaustivos, uno en Suecia, otro en Australia y otro Virginia, en los que se estudiaron todos los gemelos de la zona, todas y cada una de las parejas de gemelos y se analizó cuando uno era homosexual si el otro también lo era, como los gemelos están relacionados genéticamente es un buen punto de partidos pues resulta que los genes determinan el 50% de la orientación sexual, es el factor más importante que conocemos, aunque también hay otros factores, pero esa es muy importante también determina si alguien es gay, lesbiana, bisexual o transgénero.
¿Cuáles serían los otros factores?
Siempre pensamos que la cultura es si fuiste a una escuela católica o a una escuela protestante, si tu madre te trató bien o tu padre fue bueno contigo y no hay demasiadas pruebas de que eso sea un factor importante. Creo que la mayoría de los demás factores también son biológicos, algo que sucede en el cerebro ya sea antes del nacimiento o en una fase muy temprana durante los primeros 2 años de vida. Lo fundamental aquí es que no sabemos que hace que alguien sea heterosexual, todos dicen, simplemente es natural que a los hombres les gustan las mujeres y a las mujeres los hombres, pero no acabamos de entender como ocurre y probablemente sea el mismo tipo de proceso, las variaciones en las personas homosexuales.
¿Cuál es la importancia de la codificación genética y cerebral en la conducta personal?
Fue un avance muy rápido y creo que seguimos sin entender que el problema fundamental del cerebro que es como creamos los pensamientos y las emociones, seguimos sin entenderlo todavía es un misterio, pero lo que si que entendemos es que todo lo que controla el cerebro se ve influido por los genes que codifican el cerebro y que controlan las sustancias químicas que se liberan en el cerebro, esto ha sido importante para los biólogos, creo que también es importante para la sociedad porque a menudo se atribuyen cierto tipos de conductas a enfermedades sociales o al entorno o a una creencia religiosa y hay que entender que no es así, que forma parte de la naturaleza humana, forma parte de lo que nos hace personas, es muy importante.
¿Porqué es difícil de entender la sutileza de los genes a la hora de influir sobre la naturaleza psicobiológica?
No es fácil de entender porque no siempre es como con el gen que determina el color marrón de ojos que hará que tengas los ojos marrones, sin más así de simple, con los genes que codifican la conducta todo es mucho más indirecto, estos genes actúan liberando sustancias químicas en el cerebro y el mismo gen que hace que alguien padezca una adicción a la cocaína porque necesita dopamina puede convertir a otra persona en un gran inversor o en un gran político porque le gusta la novedad, el mismo gen la misma distancia química provoca que cosas distintas, es útil efectivamente.
¿Es verdad que hay una especie de mutación en el embrión, que cuando se descarga testosterona al parecer hace que el dedo anular sea más largo, en cuanto a la personalidad son más intrépidos y ganas 10 veces más dinero que el resto de los mortales?
Es muy posible que sea cierto porque se trata básicamente de un marcador de sucesos hormonales que suceden en una fase muy temprana y no hay duda de que muchas de las cosas que ocurren cuando todavía estamos en el útero son tan importantes como las posteriores, lo importante es que la gente entienda que se trata de diferencias biológicas que no vuelven a alguien mejor o peor, solo que sean distintas.
¿Es verdad que se podrá diseñar en un futuro genéticamente los aspecto físicos de tus hijos?
Creo que tal vez en el futuro se puedan diseñar ciertos aspectos de la conducta humana y ciertos aspectos de la apariencia física, pero no creo que sea eso lo que realmente cambia al ser humano en el futuro. Me parece que será limitado y creo que cambiar los genes tendrá menos repercusiones de las que podríamos esperar, además creo que constataremos que los efectos de la cultura son enormes y que son esos los efectos que como seres humanos podemos controlar.
Por ejemplo que la gente acepte o no acepte a los gays y las lesbianas tendrá una repercusión inmensa sobre millones y millones de perdonas de todo el mundo que ya no crecerán en lugares donde los torturen ni sufrirán humillaciones en las escuelas y otros entornos, este tipo de cambios prevalecerá sobre los cambios menores que podamos realizar genéticamente.
Dicho esto, creo que la ingeniería genética si que tendrá un papel fundamental en los casos en los que haya realmente una enfermedad clara. Por ejemplo en las personas con esquizofrenia, trastorno bipolar o psicosis grave, cuando el cerebro no funciona bien. En esos casos cuyo origen es también muy biológico, creo que la ingeniería genética puede desempeñar un papel importantísimo.
¿Podemos recurrir a otros métodos que no sean los fármacos?
Claramente la interacción con otras personas es para lo que hemos evolucionado, el cerebro ya evolucionado para tener relaciones sexuales y para interactuar con otros seres humanos, probablemente se trate de los principales motores que nos impulsan y es obvio que intentar arreglarlo todo con fármacos no es la solución, hay que construir sociedades y situaciones en las que las personas se sientan comidas unas con otras, eso es lo importante.
Todo el mundo tiene un futuro por delante, todos tenemos la misma configuración genética básica y luego hay pequeñas variaciones menores que pueden hacer que algunos sean en promedio más felices, también hay otras variaciones menores que pueden hacer que alguien sea bisexual, pero todos nosotros tenemos la capacidad de vivir vidas plenas, mis películas ensalsan estás historias y de las personas que triunfan y la esperanza que se impone, por lo menos eso espero.
Esta entrevista fue publicada por el canal de You Tube Formaticaincursos: youtube.com
REDACCIÓN WEB DEL PSICÓLOGO