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Laura Rojas: “La familia es la mejor escuela para aprender a manejar las emociones”

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Laura Rojas Marcos es Psicóloga Clínica y de la salud, investigadora, psicoterapeuta, conferencista, escritora y docente. Nació en Estados Unidos específicamente en Nueva York y realizó su carrera como psicóloga y trabajo social en distintos centros de la saludos e instituciones. Actualmente miembro de La Real Academia Europea de Doctores, también de la Asociación Española de Psicología Positiva y Federación Europea de Psicología. En este artículo les presentaremos la entrevista que el grupo BBVA aprendamos juntos 2030 realizó a la psicóloga Rojas, hablando de la familia y las emociones.
¿Qué podemos hacer los padres e hijos para mejorar la convivencia en la familia?

La convivencia es clave, como seres humanos  somos seres sociables, emocionales y necesitamos relacionarnos con los demás para poder sobrevivir, no vivimos solos en una isla, no somos seres para vivir aislados. Cuando hablamos de convivencia estamos hablando de compartir energía, de compartir emociones, de compartir sueños, de compartir un espacio. Como seres humanos también somos posesivos y somos territoriales, ese es un lado animal que tenemos todos dentro, y el convivir no es fácil porque estamos hablando de como gestionamos las emociones, los conflictos, podemos estar de acuerdo o en desacuerdo, podemos discutir. El entorno familiar prácticamente para todos es el primer escenario de nuestra vida, es donde aprendemos a convivir, a compartir, donde también hay rivalidades, donde también surgen emociones negativas como los celos o la envidia o la rabia o el miedo, forman parte de la vida y es en el entorno familiar donde aprendemos a gestionar esas emociones, aprendemos también a poner límites no solamente a otras personas si no a nosotros mismos, aprendemos a gestionar la frustración, un término que utilizamos mucho en ´psicología es el tener la capacidad para tolerar la frustración como puede ser la espera o tenemos una baja capacidad para tolerarla, por ejemplo, las personas que son impulsivas, las personas que no saben esperar, que tienen una necesidad de tener lo que ellos quieren en el momento y no saben esperar, sufren mucho y se vuelven muy impulsivos. Es en el entorno familiar y en el colegio donde hay que aprender a esperar, es un proceso que lleva muchísimo tiempo, yo diría que desde el momento en que nacemos nos vamos haciendo y vamos aprendiendo hasta el momento en que morimos vamos aprendiendo a convivir, compartir, gestionar y aprender sobre todo mucho sobre nosotros mismos y sobre los demás, es un reto, no es fácil, pero puede ser muy divertido.

¿Qué es la autoestima? ¿Podrías poner algún ejemplo para mejorarla?

La autoestima no deja de ser algo fundamental en el desarrollo de todo ser humano, no deja de ser la manera en la que apreciamos, cuando hablamos de autoestima es muy importante hablar sobre todo primero del autoconcepto, ¿Qué es el autoconcepto?, es la manera objetiva en la que nos percibimos e identificamos nuestras cualidades, nuestras fortalezas, debilidades, si somos personas abiertas, extrovertidas, extrovertidas, tímidas, alegres, optimistas, pesimistas, eso entra dentro del autoconcepto. Es a partir de como nos vemos la cualidades y características del autoconcepto que hacemos una valoración emocional respecto al me gusta como soy o no. Las personas que tiene una alta autoestima son personas que se valoran a si mismas, se gustan y se quieres, esto no quiere decir que se vean mejores que otras personas, pero quizás viven mas en paz consigo mismas, se aceptan, saben desenvolverse con el mundo, saben pedir lo que quieren, confían en si mismas.

Las personas en cambio que tienen una baja autoestima sufren, dudan de su criterio, de si mismas, a veces se vuelven personas muy dependientes de otras, no se gustan, no confían en si misas y eso es un problema, el desarrollar una buena autoestima es fundamental y es algo que aprendemos desde que somos muy pequeños, pero es algo que también se va desarrollando a lo largo de la vida, no hay que olvidar que vamos pasando por etapas distintas de la vida y cuando las cosas no nos salen bien pueden afectar nuestra autoestima, cuando nos sentimos rechazados. También es importante desarrollar un autoestima sana y eso quiere decir sobre todo donde hay una aceptación tanto de nuestras virtudes y defectos, nuestras fortalezas tenerlas bien identificadas y tener identificadas con claridad cuales son nuestras dificultades o debilidades, nadie es perfecto y el que piensa que lo sea, tiene una percepción de si misma no muy realista. La autoestima nos ayuda a ir por la vida de una manera saludable y que las personas que tienen buen autoestima tengan buenas relaciones con los demás, saben crear vínculos afectivos o saben hacer amigos, saben donde están sus límites. Tienen un diálogo  interno con ellos mismos bastante constructivo, esto no quiere decir que se vena mejores o superiores a otras personas.

Y con nuestros hijos, ¿Cómo podemos ayudarlos a desarrollar una buena autoestima?

Para ayudar a las personas a desarrollar una buena autoestima ya sean los hijos, los compañeros, etc. El papel de los padres, cuidadores, profesores es muy importante, mensaje donde se hace una valoración positiva de las características que son positivas en una persona, cuando por ejemplo un niño hace algo que está bien, es importarle decir lo bien que lo hizo, reforzar positivamente una conducta siempre es mucho mejor que decir: es que eres un niño estupendo que eso sienta muy bien pero, el centrar la autoestima en la buena o mala conducta es mucho mas importante que en cualidades que en un momento dado no podemos cambiar. Siempre es mejor recalcar hechos y no cualidades, porque estas las podemos cambiar de manera mas rápida. Comentarios positivos y constructivos, dejar que una persona aprenda y enseñar que si puedes es algo que ayudará a desarrollar una buena y una alta autoestima.

¿Qué es la asertividad? ¿Cómo podemos ser mas asertivos?

La asertividad está directamente relacionada con los límites, es básicamente el arte de saber decir que no y sentirse cómodo con ello, el saber lo que quieres, lo que no quieres y como expresarlo. Si alguien te pone presión, sentirte lo suficientemente cómodo para decir no quiero o si quiero y estar determinado a conseguir algo y voy a aplicar la asertividad.

Muchas personas confunden la asertividad con la agresividad, la agresividad es llevar a cabo una conducta violenta, no es algo bueno, cuando hablan las personas agresivas no precisamente es alguien ameno, yo diría que es alguien más tóxico, alguien que grita, que falta el respeto.

En cambio las personas asertivas emanan seguridad, sino que también saben decir que no, saben negociar y desde un lugar de calma y de serenidad, eso es muy importante.

Se aprende la asertividad, en primer lugar sintiéndote cómodo con lo que tu quieres, con lo que tú esperas y el saber expresarlo sin ofender ni faltarle el respeto al otro, si alguien te falta el respeto tú sabes defenderte y protegerte, no desde la agresividad. Una persona agresiva insulta, ofende, ya sea desde un leguaje verbal o físico, o no verbal con la mirada por ejemplo.

El aprender la asertividad es fundamental, a menudo me encuentro con personas que no saben manejarlo, se sienten incómodos con el no, sienten que deben decir que si, quizás crecieron en ambientes donde el no, no estaba permitido, lugares donde la prioridad eran las necesidades de otras personas que las propias, donde se les enseña que tú estás siempre en un segundo lugar y que hay que preocuparse mucho por el que dirán o lo que piensen los demás, las personas asertivas saben lo que quieren, lo que piensas e incluso saben gestionar sus no se, se toman el tiempo para pensar, decidir y actuar.

¿Crees que hay que ser sincero a toda costa?

Este tema afecta mucho las relaciones interpersonales, ya sean relaciones familiares, en el trabajo, cuando vamos de un lugar a otro, con los vecinos, con las personas que nos rodean. El decir la verdad y vivir desde la verdad es un buen valor, vivir desde la mentira no creo que sea algo que sea prioritario. Es muy importante las relaciones personales. el tener consideración, el ser sensible, el tener en cuenta las emociones y los sentimientos de la otra persona, ¿es necesario siempre decir la verdad aunque cause daño?. El efecto que tenga el comentario es importante. Existe una palabra que a mí me gusta mucho, sincercida, es un término que representa muy bien a muchas personas que a veces se vuelven tóxicas, en su manera de hablar, de comunicar  y hacer.

Nosotros como seres humanos somos imperfectos, pero si encuentro en personas que en nombre de la sinceridad dicen todo lo que piensan sin ningún tipo de delicadeza, consideración en nombre de la verdad y sinceridad. Esas personas son sincericida y son personas que hacen muchísimo daño, no creo que eso sea una buena cualidad, hay que diferenciarlo de ser sincero. Muchas veces no son respetuosos y aprovechan para humillar, para hacer chantaje emocional, para hacer daño y se colocan en un lugar de poder y eso no es positivo ni constructivo, generalmente se ganan enemigos por esos comentarios, te quedas solos.

¿De que manera podemos poner límites de forma eficaz en nuestra vida?

Esto está muy relacionado con la asertividad, el como decimos que no, el basta ya. Me preocupa mucho cuando paso consulta y estoy trabajando con alguien que no saben donde están sus límites, hasta donde está dispuesto a llegar, cuando no sabemos donde están nuestros límites es bastante peligroso, somos capaces incluso de ponernos en situaciones muy contraproducentes, dañinas y peligrosas para nuestra salud física o emocional.

El saber poner límites a otros es fundamental, pero no solamente poner límites a otros y que otros nos pongan nos límites a nosotros, si no, el ponernos nuestros propios límites, ahí entramos en un campo que es enorme y bastante ambiguo, tiene que ver con el dialogo interno, como yo me hablo influencia mucho en mi manera de sentir, de pensar, de actuar. A veces las personas tienen un dialogo interno sumamente destructivo e incluso cruel que si hablaran así a los demás se quedarían sin amigos y podemos ser muy crueles, no tenemos límites en ocasiones en ese dialogo interno que podamos tener. Entonces estamos hablando de proteger, de respetar un espacio, ya sea físico como emocional y mental, todos nuestros procesos cognitivos, la manera en la que pensamos, en la que actuamos, todo está relacionado y la manera en la que nos relacionamos con los demás a la hora de poner límites a otros.

¿Cómo pueden influir nuestros pensamientos en las emociones?

Cuando hablamos de las emociones no hay que olvidar que todo ser humano somos seres emocionales, sociales, pensantes y todo está conectado desde el pensamiento, desde la acción y las emociones. Hay muchísimos tipos de emociones, pero probablemente todas se basan y se apoyan en las emociones universales, la alegría, la tristeza, el miedo, el asco y la rabia, el enfado, la ira. Nos encontramos con las emociones primarias y después están las emociones complejas como la ansiedad.

A menudo como terapeuta llegan pacientes que sienten ansiedad, pero no saben que su sentir es ansiedad, tienen dificultad para identificar la emoción porque no aprendieron de pequeños que ese sentimientos y esos pensamientos unidos lo que le produce es ansiedad. Hay personas que sienten hambre pero no saben identificar el sentimiento del hambre, porque nuestro cuerpo nos habla, el pensamiento nos habla, el saber identificar las emociones es un proceso de aprendizaje desde que somos muy pequeños, el porque nos enfadamos. Hay muchos miedos que están asociados directamente a la amenaza de la vida, pero hay personas que también le tienen miedo a cosas que no son peligrosas pero que se aprendieron por sus situaciones. Dentro de los estudios de las emociones que es un campo tan interesante hay una combinación de más de 400 tipos de emociones que se identificaron en los estudios y la inteligencia emocional es algo que forma parte de nuestro crecimiento, no solamente que afectará nuestro autoestima, sino, el como nos relacionamos con los demás, con nosotros mismos.

¿Porqué muchas personas se guardan los sentimientos?

Hay personas que cuando se sienten tristes quieren que el otro se sientan tristes, otras personas no quieren compartir su tristeza o miedo, son personas protectoras que no quieren contagiar y hay otras personas que lo que sienten es la vergüenza, la vergüenza es una emoción autoconsciente, esta emoción tiene que ver con la percepción que tenemos de nosotros mismos respecto a nuestro entorno, nuestra conducta, si lo pensamos hay una evaluación respecto a esas emociones, las personas que por ejemplo sienten mucha vergüenza son muy autoconscientes de lo que hacen, de lo que dicen y están preocupados de lo que piensan otros y no suelen centrarse en lo que piensen ellos, hay personas que son muy orgullosas. El orgullo no hay que confundirlo con el amor propio, el amor propio está mas vinculado al auto respeto, quererte es algo sano, es bueno, es como cuidar tu casa, tu cuerpo tus emociones. Cuando hablamos de orgullo negativo mas ligados a la negatividad, las personas orgullosas siempre piensan que tienen la razón, no piden perdón, no son humildes y eso también los aíslan mucho, no se sienten cómodos con su vulnerabilidad, con su dolor.

Esta entrevista fue proporcionada por el canal de YouTube Aprendemos Juntos 2030: https://www.youtube.com/watch?v=CNHirXru2Tw

Redacción Web del Psicólogo

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