Seguramente alguna vez habrás escuchado sobre la cleptomanía y lo relacionas con los individuos que hurtan objetos frecuentemente, y ciertamente es así, pero la verdad es que no toda persona que roba se puede llamar cleptómana, pues existen importantes diferencias entre este trastorno y las conductas viciosas que ciertos individuos pueden adquirir. Las personas desconocen que la cleptomanía es un trastorno psicológico, pues los que la padecen son sujetos que sufren de una patología maniática que les incita a robar objetos de manera compulsiva, sin tener noción de porqué lo están haciendo y con qué finalidad quieren un determinado artículo. Al igual que todas las manías, son trastornos del ánimo ocasionados por impulsos que provocan conductas obsesivas y repetitivas, que derivan en euforia y satisfacción. En el caso de los cleptómanos o cleptomaníacos, es común que estos lleguen a sentir culpa y arrepentimiento después de hurtar algún objeto, pero eso no los detiene, porque debido a su origen maniático, mientras más veces roban, mayores son las ganas de volver a hacerlo.
Muchos ponen en duda la cleptomanía de algunas personas, porque piensan que si estas realmente tuvieran un determinado trastorno o enfermedad la expresarían y devolverían lo que han hurtado, pero la verdad es que para los individuos que padecen este tipo de manía no es fácil dar a conocer su situación, sobre todo porque desde la perspectiva social el robo se relaciona a conductas delictivas y vandálicas, lo que causa que prefieran mantenerlo en secreto y tratar de cambiar su conducta por su cuenta.(psicologoschile.com)
Diagnóstico
Si decides buscar tratamiento para los síntomas de una posible cleptomanía, es posible que tengas que someterte a evaluaciones físicas y psicológicas. La exploración física puede determinar si es posible que haya causas médicas que desencadenan tus síntomas. La cleptomanía se diagnostica según tus signos y síntomas. Debido a que es un tipo de trastorno de control de los impulsos, el médico puede realizar lo siguiente para ayudar a determinar un diagnóstico:
- Hacer preguntas sobre tus impulsos y sobre cómo te hacen sentir
- Analizar una lista de situaciones para preguntarte si alguna de ellas desencadena tus episodios de cleptomanía
- Darte cuestionarios psicológicos o autoevaluaciones para que completes
Usar los criterios del Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders DSM-5 (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales DSM-5), publicado por la American Psychiatric Association (Asociación Estadounidense de Psiquiatría)
Tratamiento
Aunque el temor, la humillación o la vergüenza pueden dificultar que busques tratamiento para la cleptomanía, es importante que pidas ayuda. La cleptomanía es difícil de superar por tu cuenta. Sin tratamiento, es probable que la cleptomanía sea un trastorno continuo a largo plazo.
El tratamiento para la cleptomanía, generalmente, comprende medicamentos y psicoterapia, o ambos; a veces, junto con un grupo de autoayuda. Sin embargo, no existe ningún tratamiento estándar para la cleptomanía, y los investigadores aún intentan comprender lo que podría funcionar mejor. Quizá debas probar varios tipos de tratamiento hasta encontrar el que te dé resultado.
Medicamentos
Hay pocas investigaciones científicas sobre el uso de medicamentos psiquiátricos para tratar la cleptomanía. Y no hay ningún medicamento aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos para tratar la cleptomanía. Sin embargo, determinados medicamentos podrían ayudar según tu situación y si tienes otros trastornos de salud mental, como depresión o abuso de sustancias.
Es posible que el médico considere recetarte lo siguiente:
- Un medicamento para tratar la adicción denominado «naltrexona», un antagonista opioide, que podría reducir el impulso y el placer asociados con robar
- Un antidepresivo; específicamente, un inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina
Otros medicamentos o una combinación de estos
Si te recetan medicamentos, pregúntale al médico, al proveedor de atención médica mental o al farmacéutico sobre los posibles efectos secundarios o las posibles interacciones con otros medicamentos.
Psicoterapia
Una forma de psicoterapia denominada «terapia cognitiva conductual» te ayuda a identificar comportamientos o creencias negativos y poco saludables, y a reemplazarlos por otros positivos y saludables. La terapia cognitiva conductual puede comprender estas técnicas para ayudarte a controlar los impulsos de la cleptomanía:
- Sensibilización conversiva, en la que te visualizas robando y enfrentando las consecuencias negativas, como si te atraparan
- Terapia de aversión, en la que practicas técnicas ligeramente dolorosas, como mantener la respiración hasta que te sientes incómodo, cuando tienes el impulso de robar
- Desensibilización sistemática, en la que practicas técnicas de relajación y te imaginas controlando los impulsos de robar
Cómo evitar las recaídas
Es frecuente tener recaídas de cleptomanía. Para ayudar a evitar las recaídas, asegúrate de cumplir con tu plan de tratamiento. Si sientes impulsos de robar, comunícate con tu profesional de salud mental o recurre a una persona de confianza o un grupo de apoyo.
Estrategias de afrontamiento y apoyo
Puedes tomar medidas saludables para cuidarte mediante la capacidad de enfrentar desafíos o situaciones mientras recibes tratamiento profesional:
Cumple con tu plan de tratamiento
Toma los medicamentos según se te indique y asiste a tus sesiones de terapia programadas. Recuerda que es un trabajo arduo y es posible que tengas contratiempos ocasionales.
Infórmate
Aprende sobre la cleptomanía para comprender mejor los factores de riesgo, los tratamientos y los episodios desencadenantes.
Identifica los factores desencadenantes
Identifica las situaciones, los pensamientos y los sentimientos que pueden desencadenar el impulso de robar para que puedas tomar medidas para controlarlo.
Busca tratamiento para el abuso de sustancias y otros problemas de salud mental
El consumo de sustancias, la depresión, la ansiedad y el estrés pueden retroalimentarse, lo que provoca un ciclo de conductas no saludables.
Encuentra medios saludables
Investiga posibles medios saludables para recanalizar tus impulsos de robar o de hurtar a través del ejercicio y de las actividades recreativas.
Aprende a relajarte y a controlar el estrés
Prueba técnicas de reducción del estrés, como la meditación, el yoga o el taichí.
Concéntrate en tu objetivo
Recuperarse de la cleptomanía puede llevar tiempo. Mantente motivado teniendo tus objetivos de recuperación en mente y recordando que puedes trabajar para reparar tanto las relaciones dañadas como los problemas económicos y legales.
Apoyo a los seres queridos
Si un ser querido recibe tratamiento para la cleptomanía, asegúrate de comprender los detalles del plan de tratamiento y brindarle apoyo de forma activa para que tenga éxito. Puede ser útil que asistas a una o más sesiones de terapia con tu ser querido para familiarizarte con los factores que parecen desencadenar el impulso de robar, así como con los modos más efectivos para afrontarlo.
Es posible que también te resulte beneficioso hablar con un terapeuta. Recuperarse de un trastorno de control de los impulsos es un compromiso desafiante y a largo plazo, tanto para quien lo padece como para las personas de su entorno. Asegúrate de atender tus propias necesidades con los métodos de reducción del estrés que te resulten más efectivos, como hacer ejercicio, meditar o reunirte con amigos.
Grupos de autoayuda
A las personas que padecen cleptomanía puede resultarles beneficioso participar en grupos de autoayuda que se basan en los programas de 12 pasos. Incluso si no encuentras un grupo específico para la cleptomanía, es posible que te resulte útil asistir a reuniones de Alcohólicos Anónimos o de otras adicciones. Estos grupos no son para todos los gustos, así que pregúntale al profesional de salud mental sobre las distintas alternativas.
Preparación para la consulta
Si luchas contra una necesidad irresistible de robar, habla con el médico. Sin duda, esa conversación te parecerá inquietante, pero confía en que el médico está interesado en cuidar tu salud, no en juzgarte. El médico puede derivarte a un profesional de salud mental, como un psiquiatra, con experiencia en el diagnóstico y tratamiento de la cleptomanía.
Tal vez sea conveniente pedirle a un familiar o a un amigo de confianza que te acompañe para que te ayude a recordar los detalles. Además, alguien que te conoce desde hace mucho tiempo puede hacer preguntas o compartir información con el profesional de salud mental que tú no recuerdes mencionar.(mayoclinic.org)
Fuentes
REDACCIÓN WEB DEL PSICÓLOGO