La neurastenia es un trastorno psiquiátrico, el cual forma parte de los denominados trastornos neuróticos. El término neurastenia fue introducido por primera vez por George Millar Beard (1869) teniendo un auge importante en el pasado y desapareciendo por completo en nuestro centenar. No obstante, aunque su clasificación diagnóstica fue eliminada del DSM-II, sigue manteniéndose como trastorno psiquiátrico en el CIE-10. En la actualidad, el término neurastenia no se utiliza. Sin embargo, en tiempos de Freud, era uno de los diagnósticos más utilizados. Pero, ¿Qué es la neurastenia? El concepto de neurastenia corresponde con un trastorno caracterizado por la profunda sensación de fatiga y agotamiento, sin la presencia de un esfuerzo significativo.
El cansancio es el síntoma más característico de la neurastenia, no obstante, es acompañado por otros síntomas. Ante esta sensación de fatiga, la persona presenta una elevada irritabilidad y malestar general. Además, tienden a presentar insomnio, así como un desinterés objetivo frente a las distintas actividades, alteraciones en el apetito y en la funcionalidad en distintas áreas de la vida cotidiana, como en el trabajo.
A nivel emocional, se presentan cuadros de ansiedad, explosiones de ira, desesperanza y emociones de tristeza. Como podemos observar, la clínica de la neurastenia es de funcionamiento depresivo. De hecho, la neurastenia es la etiqueta diagnóstica que, en ese momento, representaba lo que hoy en día llamaríamos depresión.
En las últimas ediciones de DSM (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales) se emplean otros términos para referirse a lo que antes se englobaba dentro del término Neurosis y sus diferentes tipos. Así por ejemplo, en el DSM-5 ya no se habla de neurosis de ansiedad, sino de Trastornos de la ansiedad, o de neurosis obsesiva sino de Trastorno obsesivo-compulsivo.
El término Neurosis fue introducido por un médico escocés llamado William Cullen (1710-1790) en su famoso tratado de medicina publicado en 1784 bajo el siguiente título: “First Lines of the Practice of Physics”. Este libro fue un manual de medicina durante muchos años en el Reino Unido y en los Estados Unidos de América. Cullen fue profesor de la Universidad de Edimburgo, donde fue el primero en impartir sus clases en inglés en lugar de latín, que era lo habitual en ese tiempo.
En su famoso tratado Cullen hablaba de Neurosis or Nervous Diseases, e incluía en ellas la neurosis cardíaca, neurosis gástrica, dispepsia, histeria, neurastenia, entre otras.(psicoterapeutas.eu)
Causas de la neurastenia
Las causas de la neurastenia son múltiples. Han existido y existen diferentes teorías e hipótesis que apoyan unas u otras causas de la neurastenia. Es decir, la etiología de la neurastenia ha ido fluctuando a lo largo de los años. A primera instancia, la neurastenia era comprendida como un agotamiento de fuerzas nerviosas, acompañado de las exigencias de la sociedad, causando con ello una intoxicación del organismo a partir de la toxina “quenotoxina” o toxina de la fatiga. Posteriormente, fueron ganando importancia los factores físicos y constitucionales de la persona, alejando la etiología de la neurastenia como agotamiento agudo del sistema nervioso.
En la actualidad, el planteamiento más acotado sobre las causas de la neurastenia son los factores afectivos. No obstante, el factor emocional no siempre es el desencadenante de dicho trastorno. Frente a ello, hay que destacar la tendencia a reaccionar de una forma u otra como un factor a tener presente. Así pues, la nerviosidad constitucional tiene una importante relevancia en las causas del trastorno, siendo la participación afectiva presentada en forma de inquietudes, miedos y ansiedades el factor más relevante en su etiología.
Por otro lado, también pueden ser causas de la neurastenia enfermedades infecciosas, como la gripe o intoxicaciones crónicas, también algunas enfermedades metabólicas tales como la diabetes, y otras causas orgánicas como un traumatismo craneal, el cáncer o determinadas afectaciones intestinales. En resumen, podemos observar que las causas de la neurastenia pueden ser muy diversas, presentando factores psíquicos y orgánicos. Aun está por aclarar cuáles son la causa y cuáles la consecuencia.
Síntomas de la neurastenia
Los síntomas de la neurastenia son variados y se separan en 2 grupos: los síntomas psíquicos y los síntomas orgánicos. Los síntomas más representativos de la neurastenia son los siguientes:
Síntomas psíquicos de la neurastenia
- Cansancio y fatiga
- Estado de ánimo de tristeza
- Pseudofalta de memoria
- Dificultad para focalizar la atención y concentrarse
- Pesimismo
- Insomnio
- Indecisión
Síntomas orgánicos de la neurastenia
- Hiperestesias
- Parestesias
- Problemas de visión u oídos
- Astenia
- Fatiga muscular
- Temblor
- Trastornos en la esfera sexual, como deseo sexual hipoactivo
- Alteraciones circulatorias: hipotensión arterial, alteraciones del ritmo cardíaco, sofocos
- Alteraciones en el aparato digestivo: anorexia relacionada con la sensación de plenitud gástrica
- Respiración superficial
- Alteraciones renales: polaquiuria, fosfaturia
Tratamiento de la neurastenia
Frente a las distintas etiologías de la neurastenia y las distintas presentaciones sintomáticas, es preciso acotar su tratamiento a la presentación de estas. Por ello, para el tratamiento de la neurastenia, se plantean diferentes intervenciones:
Tratamiento biológico-constitucional
Este tratamiento tiende a focalizar su abordaje en recursos vitamínicos, siendo los más frecuentes el complejo B y la vitamina B1.
Tratamiento sintomático
El abordaje sintomático se establece mediante la administración de medicamentos, siendo distintos en función de la sintomatología presentada. Los fármacos más utilizados para el tratamiento de la neurastenia son los sedantes y los hipnóticos.
Tratamiento higiénico-dietético
Frente a las características de este trastorno, es frecuente que las personas que lo padecen descuiden los hábitos necesarios para llevar una vida sana. Por ello, en muchas ocasiones es necesario establecer un abordaje en la realización de ejercicio físico y una correcta alimentación.
Tratamiento psicoterapéutico
Las personas con neurastenia tienden a tener un bajo concepto de sí mismas. Frente a ello, es importante hacer un trabajo psicoterapéutico para mejorar el autoconcepto, la autoestima y los patrones de pensamiento mediante, por ejemplo, las técnicas de la terapia cognitivo-conductual.
Tratamiento mixto o integral
Frente a la gran cantidad de modalidades terapéuticas, es aconsejable establecer un tratamiento que emplee los recursos citados previamente en una forma de terapia integral, para abordar las diferentes áreas en las que afecta el trastorno.
Psicastenia: ¿un tipo de neurastenia?
La definición de psicastenia corresponde a un conjunto de síntomas asociados a la ansiedad, las fobias, los tics nerviosos, las obsesiones y las compulsiones. La etimología de la palabra psicastenia deriva del griego “phsyche” traducido como alma y “astenia”, sin fuerzas. Las personas que sufren psicastenia presentan una sintomatología muy diferenciada a la neurastenia en general, caracterizada por una obsesión que gira en torno de una idea e invade los pensamientos de la persona constantemente, aunque quiera dejar de pensar en ella. Esta obsesión genera una intensidad emocional en la persona y aunque pueda contemplar la idea como absurda y le genere un gran sufrimiento, no puede desprenderse de ella. Ante el intento de eliminar este pensamiento obsesivo, las personas tienden a evidenciar conductas compulsivas, apareciendo además un cuadro de elevado estrés y ansiedad.(psicologia-online.com)
Fuentes
REDACCIÓN WEB DEL PSICÓLOGO