La memoria a corto plazo desempeña un papel esencial en el proceso del recuerdo ya que se halla en la base del aprendizaje y la resolución de problemas permitiéndonos retener información durante un periodo de tiempo breve de tiempo, pero suficiente para encadenar los datos y darles una lógica. Gracias a la memoria a corto plazo podemos mantener una conversación coherente o seguir los pasos de una receta, por ejemplo. Sin embargo, ¿sabes cuánto dura realmente ese tipo de memoria? El paciente que permitió determinar cuánto dura la memoria a corto plazo. Para la Psicología, el término “corto plazo” es realmente un periodo de tiempo muy breve, de manera que existe cierto consenso sobre el hecho de que la memoria a corto plazo dura entre 15 y 30 segundos. No dura días, ni horas ni minutos, sino tan solo 15-30 segundos.
¿Cómo se ha determinado?
Los psicólogos cognitivos establecieron que la memoria a corto plazo solo se mantiene durante un rango de 15 a 30 segundos tras analizar a pacientes que han sufrido amnesia. El primer paciente documentado que mostró una pérdida profunda de la memoria a largo plazo manteniendo la memoria a corto plazo intacta se llamó Henry M.
Fue tratado por epilepsia cuando tenía 20 años, en la década de 1950. En aquel momento, los médicos le extirparon una parte del cerebro para intentar curarlo de las crisis convulsivas. Aunque la epilepsia mejoró, sufrió graves consecuencias: perdió la capacidad para formar nuevos recuerdos a largo plazo. Durante los 40 años que vivió después de su cirugía, Henry M. no formó ningún recuerdo nuevo significativo sobre su vida.
Henry M. no recordaba lo que había hecho el día anterior y no reconocía al médico que lo trató durante esos 40 años, pero podía recordar un número de teléfono y repetirlo a otra persona, así como mantener una conversación relativamente normal ya que retenía la información durante unos breves segundos en su memoria antes de que desapareciera.
La neurocientífica Suzanne Corkin comparó la memoria con un hotel. Podemos ver la memoria a corto plazo como el vestíbulo y la memoria a largo plazo como las habitaciones de los huéspedes. Escribió: “la información se recopila en el vestíbulo del hotel del cerebro de Henry, pero no se puede registrar en las habitaciones”.
Otros estudios realizados con pacientes con amnesia anterógrada y personas que tenían la memoria intacta han confirmado que la memoria a corto plazo dura entre 15 y 30 segundos. Barbosa, J. et. Al. (2020)
Fragmentación, la técnica para mejorar la memoria de trabajo
La brevedad de la memoria a corto plazo también explica por qué nos resulta tan difícil recordar una serie de números durante mucho tiempo, a menos que los repitamos una y otra vez en nuestra mente. Esa repetición actualiza la memoria a corto plazo, la cual se deteriora rápidamente, de manera que su contenido se desvanece tras 30 segundos si no logramos almacenarlo en la memoria a largo plazo.
En este sentido, un estudio realizado en el Institut d’Investigacions Biomèdiques August Pi i Sunyer sugirió que la actividad de la memoria a corto plazo es muy frágil y comienza a degradarse a partir de los primeros 10 segundos. No obstante, estos investigadores hipotetizan que la actividad de la memoria a corto plazo no desaparece simplemente, sino que se difunde en la red neuronal, de manera que al final el recuerdo es diferente y está distorsionado.
En práctica, no se trataría de una pérdida en el sentido más estricto del término sino más bien de que las neuronas que se encuentran en la base de la memoria a corto plazo pierden su estabilidad y la información se va difuminando si no pasa a la memoria a largo plazo.
No obstante, también se ha apreciado que las personas con un cociente intelectual más elevado son capaces de retener más información en su memoria a corto plazo. Existe una técnica sencilla denominada “Fragmentación” que sirve para ampliar la cantidad de datos que podemos almacenar en nuestra memoria a corto plazo.
Un método para mejorar nuestra capacidad de recordar datos durante un período de tiempo breve consiste en fragmentar esa información; o sea, organizarla en secciones significativas. Por ejemplo, es más fácil recordar 9 números si lo dividimos en 3 grupos de 3. También es más sencillo recordar un número largo dividiéndolo en secciones más cortas, como solemos hacer con los números de teléfono.
En general, una persona promedio en condiciones normales debe ser capaz de mantener una media de 4 elementos en su memoria a corto plazo. Sin embargo, si aplica la técnica de la fragmentación puede recordar mucho más. Monuszko, K. (2014)
Fuentes
- Barbosa, J. et. Al. (2020) Interplay between persistent activity and activity-silent dynamics in the prefrontal cortex underlies serial biases in working memory. Nature Neuroscience; 23: 1016–1024.
- Monuszko, K. (2014) Permanent Present Tense: The Unforgettable Life of the Amnesic Patient, H.M. J Undergrad Neurosci Educ; 12(2): R3–R4.
REDACCIÓN WEB DEL PSICÓLOGO